index | Galería A34

RETRATOS

11 de junio - 30 de julio de 2022

La aparición de la fotografía en el siglo XIX supuso un cambio decisivo en la tradición del retrato, hasta entonces un privilegio reservado a la aristocracia y la alta burguesía.

El primer procedimiento fotográfico fue ideado por Niépce en 1824, autor de la primera fotografía que se conserva, Vista desde la ventana en Le Gras, fechada en 1826. Durante los primeros años, paisajes y bodegones fueron los temas favoritos porque, por problemas técnicos, el tiempo de exposición necesario para fijar la imagen era muy largo.

Pero a partir de la invención del daguerrotipo en 1839, que redujo considerablemente el tiempo de exposición y, sobre todo, de la cámara de cuatro objetivos patentada por Disdéri en 1851... —que permitía obtener una serie de ocho imágenes a las que llamó cartes de visite— el retrato se convirtió en uno de los genéros más populares gracias a su bajo costo, su pequeño formato y la posibilidad de reproducción; aunque también tuvo sus detractores.

En 1859 la fotografía es incluida por primera vez en el Salón de Bellas Artes de París. En “Le publique moderne et la photographie”, artículo publicado en La Revue Française dedicado a la sección fotográfica del Salón, Baudelaire escribió:

«En materia de pintura y de estatuaria, el Credo actual de las gentes de mundo […] es éste: "Creo en la naturaleza y no creo más que en la naturaleza (hay buenas razones para ello). Creo que el arte es y no puede ser más que la reproducción exacta de la naturaleza […] De este modo, la industria que nos daría un resultado idéntico a la naturaleza sería el arte absoluto". Un Dios vengador ha atendido a los ruegos de esta multitud. Daguerre fue su Mesías. Y entonces se dice: "Puesto que la fotografía nos da todas las garantías deseables de exactitud (eso creen, ¡los insensatos!), el arte es la fotografía". A partir de ese momento, la sociedad inmunda se precipitó, como un solo Narciso, a contemplar su trivial imagen sobre el metal. Una locura, un fanatismo extraordinario se apoderó de todos esos nuevos adoradores del sol.»

A34 participa en la tercera edición del festival Lumínic con obras de Antoni Bernad, Francesc Català-Roca, Lucien Clergue, Colita, Denise Colomb, Jeff Cowen, Robert Doisneau, Pepe Lamarca, Oriol Maspons, Isabel Muñoz, Leopoldo Pomés, Marc Trivier y Joan Vilatobà.